Tom Thorne investiga el caso de en un misterioso asesino en serie, cuyas tres primeras víctimas terminaron muertas. El cuarto no tuvo tanta suerte, pues Alison Willetts logró sobrevivir a un accidente cerebrovascular, deliberadamente inducido por la manipulación de los puntos de presión en la cabeza y el cuello. Ella puede ver, oír y sentir, es consciente de todo lo que sucede a su alrededor, pero ella es incapaz de moverse o comunicarse. Al salir de Alison viva, la policía cree que el ... |